ONG conservacionistas y la Real Federación Española de Caza alertan de la catástrofe ambiental que supondría esparcir 86 toneladas de rodenticidas en Castilla y León .
ONG conservacionistas y la Real Federación Española de Caza alertan de la
catástrofe ambiental que supondría esparcir 86 toneladas de rodenticidas en
Castilla y León
- Ante la previsión de una plaga de topillo campesino la Junta de Castilla y León ha adjudicado a dos empresas el suministro del rodenticida bromadiolona con un gasto de unos 190.000€
- SEO/BirdLife, WWF/España, SECEM, ACENVA, ASCEL, ANPA, GREFA y la Real Federación Española de Caza consideran que el uso de veneno incrementará el daño ambiental que ya esta produciendo la quema de linderos y cunetas para prevenir una plaga que aún no ha sido declarada
Valladolid,
18/12/2013
– El pasado 13 de noviembre la Consejería de Agricultura y Ganadería publicaba un anuncio
por el que se convocaba una licitación pública, mediante procedimiento de
Libre Acceso, de un contrato que tiene por
objeto el "Suministro de Productos Rodenticidas para el
Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (ITACYL)". El 2 de
diciembre se publicó el anuncio
de las dos empresas que se encargarán de dicho suministro, Ibysan Productos
Sanitarios Auxiliares, S.L y Química de Munguía, S.A que suministrarán 48
toneladas de cereal envenenado con rodenticidas y que se unen a los adquiridos
en años anteriores. Estos venenos rodenticidas adquiridos contienen la
sustancia activa bromadiolona, un raticida anticoagulante de segunda generación
no selectivo que se pretende repartir en forma de semillas de cereal
impregnadas, quedando accesibles para cualquier animal, mamífero o ave. Esta
distribución indiscriminada por las tierras de Castilla y León, y sin las
medidas de precaución necesarias ha supuesto en años anteriores una gran
mortalidad de especies que no eran objeto del control.
Sorprende además que la Junta de Castilla y León emprenda ahora un gasto de
190.000€ para adquirir este veneno cuando en
el año 2012 ya se habían adquirido por el ITACYL 38 toneladas de cebos con
bromadiolona y que no fueron utilizadas al no declararse finalmente la plaga de
topillo campesino. Estaríamos por tanto ante la posibilidad de que desde la Junta de Castilla y León se esté preparando un
envenenamiento masivo del medio natural con la utilización de más de 86
toneladas de raticidas.
El uso de rodenticidas tiene
efectos muy perjudiciales sobre las aves rapaces, mamíferos carnívoros y
cualquier animal que pueda entrar en contacto con el cebo, incluyendo especies
cinegéticas como liebres y palomas, perdices o conejos.
Además, la aplicación de
rodenticidas supone riesgos para la salud, como la expansión de la tularemia o
la intoxicación del ganado ovino que consuma el cereal tratado con
rodenticidas. Ya durante la plaga de 2007 se tuvo que prohibir el consumo de
pichones en Palencia, al detectarse centenares de palomas intoxicadas con
clorofacinona.
Otro riesgo posible que
ponen de manifiesto conservacionistas y cazadores es el de generar poblaciones
de roedores resistentes a los tratamientos químicos, suponiendo a largo plazo
que cualquier medida de control químico resultase ineficaz.
La ineficacia de estas medidas de control se constató en las anteriores campañas de envenenamiento que
llevó a cabo la Junta de Castilla y León en las que invirtió hasta 16
millones de euros. Aún así, tuvo que pagar otros 9 millones en compensaciones
por daños, y no ha evaluado la eficacia real de las medidas hasta ahora. Por
tanto, podría repetirse la misma situación de derroche y despilfarro.
Quemas de linderos y cunetas
Las quemas que se están
produciendo en algunas zonas de Castilla y León, promovidas y autorizadas por
la propia administración, son medidas completamente ineficaces para combatir la
proliferación de topillos. Además, tienen efectos adversos para la
biodiversidad, al destruir el hábitat de reproducción, alimento y refugio de
especies silvestres que pueden contribuir al control natural de plagas.
Asimismo, aumentan el riesgo de erosión y de incendio y fomentan la eliminación
de microorganismos beneficiosos para el suelo.
La destrucción o deterioro
de las áreas de reproducción está prohibido por la Directiva de Aves, el Convenio de Berna y la Ley de Patrimonio Natural y Biodiversidad y sólo puede
llevarse a cabo bajo un régimen de excepciones que no se está cumpliendo en
estos casos. Por ello, las quemas autorizadas podrían acarrear graves
sanciones.
La grave situación que se
está planteando para la conservación del medio natural en Castilla y León será
expuesta por las organizaciones conservacionistas al Ministro Miguel Arias
Cañete en el Consejo Asesor de Medio Ambiente que se reúne hoy miércoles.
Asociaciones firmantes:
SEO/BirdLife
WWF/España
Real Federación Española de Caza (RFEC
Asociación para la Conservación y Estudio
del lobo ibérico (ASCEL
Asociación para la Conservación y Estudio
de la Naturaleza de
Valladolid (ACEN
Asociación de Naturalistas Palentinos (ANPA)
Grupo De Rehabilitación de la fauna autóctona y su
Habitat (GREFA)
Sociedad Española para la Conservación y Estudio
de los Mamíferos (SECEM)